ADIOS AL AMIGO

Durante mi vida he tenido la fortuna de conocer algunos pocos “ángeles vivos”, tanto humanos como animales, son seres muy, pero muy especiales.

Hace quince años me despedí de una persona muy linda y única, la Abuelita paterna de mi hijo. A ella le agradezco mucho... mucho; la quise bastante y todos los días la recuerdo y la llevo en mi corazón; son varios años sin ella presente de forma material, pero el alma, la bondad, sus enseñanzas y su corazón viven en mi por siempre; tal como yo quise a mateo, ella quiso a danger.

Hoy me toco despedir a un animalito, a el le agradezco desde lo más profundo de mi alma y de mi corazón no solo la compañía que nos brindo sino también la transformación que nuestra vida presento al adoptarlo como un miembro muy valioso de la familia.

Pensando y gracias a él, en el año 2000 compre un libro, Animales: maestros y sanadores (Susan Chernak McElroy). Lo he leído varias veces, hoy lo volví a tomar, para leer fragmentos que me van a hacer recordar al bebe que se alejo por un tiempo de nuestra casa.

Mi hermana me decía todos los días, ¿Que seria de su vida sin el? Si, tenia razón, la casa se siente sola, ya no esta; siempre detrás de nosotros para que lo consintiéramos, lo alzáramos, le diéramos galletas, ya no hay quien salga a recibirnos o nos pelee cuando a la calle nos íbamos y no lo llevábamos, era el tema principal de conversación de la familia.

Los días han estado muy lluviosos, pero hoy hizo sol, se nos permitió a mi sobrino y a mi enterrar a mate y hacerle una ceremonia, Gracias Felipe, él te quiso mucho.

Eras pequeño pero con un corazón muy grande. Tú solito te encargaste de darnos más, mucho más que cien personas juntas, estabas con nosotros en la buenas y en las malas. Gracias, fuiste un gran amigo, un gran compañero, nos enseñaste demasiado, nos diste un amor incondicional y muchas, muchas cosas más, nuevamente gracias; te quisimos mucho, te vamos a extrañar, nunca te vamos a olvidar y más adelante nos volveremos a encontrar.

Una amiga me recomendó visitar un blog. En el encontré este bonito escrito. Gracias a las dos.

El Puente del Arco Iris.

Hay un puente que une el Paraíso y la Tierra, y se llama el Puente del Arco Iris.

Cuando un animal que ha sido especialmente amado por alguien aquí en la Tierra muere, entonces va a esperar en este lado del Puente del Arco Iris.

Allí hay valles y colinas para todos nuestros amigos especiales, para que ellos puedan correr y jugar juntos.

Hay mucha comida, agua y sol, y nuestros amigos se encuentran cómodos y seguros.

Todos los animales que han estado enfermos o que eran ancianos, recuperan su salud y vigor; aquellos que fueron heridos o mutilados recuperan lo perdido y son fuertes nuevamente, tal como los recordamos en nuestros sueños de días y tiempos pasados.

Los animales están felices y contentos, excepto por una pequeña cosa: cada uno de ellos extraña a alguien muy especial, alguien a quien tuvo que dejar atrás en la tierra.

Todos corren y juegan juntos, pero llega un día en que uno de ellos se detiene de repente y mira a la lejanía. Sus brillantes ojos se ponen atentos; su impaciente cuerpo se estremece y vibra. De repente se aleja corriendo del grupo, volando sobre la verde hierba, corriendo cada vez más rápido.

Tu amigo te ha visto, y cuando tú y tu amigo especial finalmente os encontráis, los dos os abrazáis en un maravilloso reencuentro, para nunca separarse de nuevo. Una lluvia de besos cae sobre tu rostro; tus manos acarician nuevamente esa cabeza tan amada, y puedes mirar nuevamente a los confiados ojos de tu mascota, tanto tiempo apartada de tu vida, pero nunca ausente de tu corazón.

Entonces los dos cruzáis el Puente del Arco Iris juntos...

Anónimo.